Google

RESTAURACIÓN - TIENES UNA SALIDA


Busco cómo empezar….y lo primero que me sale es…!Gracias Señor!...
Cuando llegué a esta iglesia, en Octubre de 2009, venía poco más que devastada, con un corazón realmente destrozado, aun cuando Cristo era autoridad en mi vida.
Durante vario tiempo estuve apartada del Señor, pero es sabido que cuando le recibís, ya no te deja más, y aunque uno apaga al Espíritu Santo, su llama sigue encendida, y puja por salir, y en mi caso, ganó lugar!!.
Antes de venirme de Posadas, había prometido al Señor ordenarme y ser fiel primero yo con Él, antes que Él conmigo….
Muchos ya saben que mi situación económica era nula. No tenía trabajo, vivíamos en un edificio abandonado y comíamos cuando alguien nos bendecía, pero nunca dejé de pensar en que Dios podía revertir todo eso.
Así llegué a Carlos Paz, y a esta iglesia que para mi sorpresa era pastoreada por dos personas que fueron muy importantes en mi vida, Carlos y Vivi Chialva.
Después de perseguirla un tiempo a mi querida pastora, comencé mi Restauración, y lo pongo en mayúsculas, porque es así de importante lo que hace en la vida de uno.
Desde ese tiempo a esta parte, mi vida es otra cosa porque puedo experimentar el gran amor de Dios y de los milagros que puede hacer en uno, cuando uno le permite.
Restaurarse es “volver algo a nuevo”, sacar de adentro todo lo nocivo, todo lo que frena la bendición del Señor…porque no solo el enemigo se interpone, a veces nosotros mismos somos quienes intervenimos en los planes de Dios, al no querer abandonarnos a Su voluntad. Una de las maneras de manifestar el amor al Señor, es entregarnos con los brazos abiertos, dejarlo que El fluya, sane, limpie, purifique, cambie, suplante, y todo lo que tenga para cada uno de nosotros.
Eso hace la restauración, y eso es lo que rescato de este ministerio que ayuda a muchas personas que como yo, están en una encrucijada, en una situación que parece irreversible..
Hoy, después de lo que Dios hizo y sigue haciendo en mí vida, puedo disfrutar de TODO lo que tengo. Mucho o poco, pero agradecida de no estar sola, de saber que tengo a alguien que me perdonó y me “restauró” y que todo lo puedo si me tomo fuerte de su mano.
Por eso, te invito y te animo a que disfrutes de esta posibilidad que Dios nos da, y de la bendición de saber que hay gente que se prepara para ayudarte en esta nueva etapa. Te animo a que tengas confianza en estas personas, que fueron llamadas a este Ministerio y que en la absoluta reserva queda todo lo conversado.
Animate, disfrutá este regalo que el Señor te da para que seas libre, y pueda usarte para el propósito con el cual fuiste creado!
Que Dios bendiga tu vida!!

Karina Camacho

No hay comentarios:

Publicar un comentario